Anuncio de la Gran
Tribulación
Tocó
el cuarto ángel su trompeta, y fue oscurecida la tercera
parte del sol, de la luna y de las estrellas, de modo que se
oscureció la tercera parte de ellos. Así quedó sin luz la
tercera parte del día y la tercera parte de la noche. Seguí
observando, y oí un águila que volaba en medio del cielo y
gritaba fuertemente: ¡Ay! ¡Ay! ¡Ay de los habitantes de la
tierra cuando suenen las tres trompetas que los últimos tres
ángeles están a punto de tocar!” (Ap.8, 12-13).